Dynamo

Publicado en el periódico EL DIA, el lunes 8 de septiembre

Carlos de Vargas
SANTO DOMINGO
Son populares, jóvenes y atractivos. Son Kudai. La conocida banda de pop adolescente chilena se presentó con éxito en el salón La Fiesta del hotel Jaragua ante un público compuesto por jovencitos con edades entre 10 y 17 años, muchos acompañados por sus padres.

Sus integrantes: Tomás, Pablo, Bárbara y Gabriela, junto a una poderosa banda compuesta por 5 músicos, pusieron a gritar durante una hora y veinte minutos, sin parar, a una audiencia que coreaba sus canciones mucho antes del verlos salir a escena.

Se mostraron agradecidos de presentar en Santo Domingo su espectáculo "Nadha", y resaltaron la alegría y simpatía de los dominicanos.

Lo visual
Tres pantallas ubicadas en el fondo del escenario iban mostrando imágenes presentes y pasadas del popular grupo. Estuvieron vestidos con una mezcla de estilos que retoma las tendencias de los años 80, con lo gótico, lo oscuro y lo urbano.

Pablo, con sus tatuajes y perforaciones lucía el más excéntrico; Tomás, con cabeza raspada, camisa a cuadros y cadenas en la cintura, urbano; y las hermosas Bárbara y Gabriela, vestidas completas de oscuro, hacían recordar gratamente a las “mujeres fatales” del cine negro de Hollywood los años 40.

Público satisfecho
En la actualidad, Kudai es una de las bandas adolescentes más populares en Latinoamérica, interpretaron 16 canciones, entre ellas “Sin despertar”, “Mis quince años”, “Ya nada queda”, “Lejos de la ciudad”, “Quiero huir”, “Déjame gritar”, y “Escapar”, canciones fáciles de memorizar, hechas para que se repitan en las mentes de los jovencitos y cuyos contenidos abordan temas actuales como la preservación del medio ambiente y la paz mundial.

Kudai llegó desde Estados Unidos donde se presentó a casa llena, para llegar al país a entregar su primer concierto en esta tierra que los recibió como héroes.

Los teloneros
La banda de rock Auro y Clemt abrió la noche con la canción “Crece”, a la que le sucedieron otras cinco. Auro, Ozma, Lingo y Dafurio se las ingeniaron para salir airosos ante un público que nunca entendió la razón de la contraparte. Entre aplausos y gritos de los “nenes” del público pidiendo a Kudai se despidieron del escenario.